Este es el segundo episodio de nuestra serie sobre el empirismo, sobre cómo el obispo irlandés George Berkeley llevó el empirismo a sus extremos lógicos, al punto de negar la existencia de las sustancias materiales del mundo.
Berkeley escribió sus textos fundamentales antes de cumplir treinta años. El primero, «Ensayo sobre los principios del entendimiento humano» (1710), constituye la más clara y sistemática explicación de sus ideas (disponible aquí en inglés; de especial valor son las secciones 1-50). Esas ideas, sin alteraciones de fondo, aparecen de manera más didáctica en sus «Tres diálogos entre Hilas y Filonús» (disponible aquí en inglés y en esta edición en español). La prosa de Berkeley es sencilla y divertida incluso, al punto de que sus argumentos parecen conducirnos sin mayor resistencia hasta que nos dan la estocada de sus excéntricas conclusiones.